Uno de los grandes problemas que hoy atraviesa el mundo, ante la creciente espiral de violencia es sin lugar a dudas la falta de espiritualidad y de valores morales;
Ya que vivimos en la era de la globalización neoliberal, un sistema que gira en torno al mercado, siendo sus expresiones más visibles el consumismo descontrolado, el materialismo, el narcisismo, el hedonismo, la discriminación, la superficialidad y la creciente cada vez más falta de sentido de la vida, es en ese sentido ante la carencia de control sobre los factores desviados en el camino de la virtud , dar a conocer en este pequeño escrito algunos parámetros sobre la importancia de la piedad, la Taqwa, para el mundo, pues cada vez más urge la necesidad del crecimiento y el retorno de la fe, como una visión interior que ayuda a los seres humanos a superar sus debilidades.
La palabra Taqwa (التقوى) significa “tolerancia, miedo, abstinencia”, piedad, temor a Dios, amor por Allah y autocontrol, también entendiéndolo como un término moral significa “alejarse de los pecados y obedecer las órdenes de Dios”, al mismo tiempo señalar que existen muchos significados que a menudo se traduce como “temor a Dios”, y aunque temer a Allah es parte de la Taqwa su significado es mucho más profundo que esto.
El significado lingüístico de Taqwa es “un escudo o barrera protectora”, que sirve para protegerse de lo que enoja a Dios, en ese sentido algunos eruditos definen la palabra “taqwa” como colocar una barrera protectora entre usted y el castigo de Allah, de ahí es que taqwa también significa hacer lo que Dios ha ordenado y evitar lo que Él ha prohibido.
Taqwa es una de las características más virtuosas que puede tener un musulmán: Dios dice:
“En verdad el más honorable de ustedes con Allah, es ese (creyente) que tiene al Taqwa. En verdad, Allah es Omnisciente, está bien informado” (Corán 49:13).
“Y quien tenga la Taqwa de Allah hará que su asunto sea más fácil” (Corán 65:4).
Es en ese sentido, también que dentro su filosofía, en relación con la piedad, es ese miedo de librar a todo ser humano de toda esclavitud; pues quien tiene taqwa, no se arrodilla ante la lujuria, no cede a la posición y otros deseos carnales, por lo que está a salvo de cualquier destrucción, por ende, la piedad tiene muchos efectos positivos en la vida humana, como la humanización, como lo señala el Imam Ali (AS): “La piedad es un rasgo espiritual y una formación espiritual de la luz de cual el alma humana se hace y se apaga”.
Y entendiendo esta connotación, de taqwa como la protección interna y el bloqueo interno que evita que una persona cometa pecados; es decir como abstinencia del pecado, siendo uno de los factores más importantes para el mundo de hoy, es que el islam ha establecido la piedad, también como criterio, para evaluar a los seres humanos y lo enfatiza tanto que en el Sagrado Corán, Dios llama a las personas más honorables como las más piadosas.
Se ha narrado que el Imam Muhammad Al Baqir (AS), dice: “Dios protege al siervo lo que su intelecto no alcanza a través de la piedad y le quita la ceguera y la ignorancia”.
También el Sagrado Corán, en la Sura Al Ma´idah, versículo 27, dice: “¡Dios acepta a los piadosos!; es decir el criterio para aceptar una buena acción es la piedad humana, Taqwa, y la piedad que eleva nuestra acción”.
Al mismo tiempo, según el Imam Ali (AS), en el Nahj al-balagha, en el Sermón al-Muttaqin (el sermón de los piadosos) (2), señala que: “Una persona piadosa, es un ser humano virtuoso que ayuda a las personas y satisface sus necesidades, es una persona humilde, que habla correctamente; es decir dice algo útil tanto para él como para la sociedad, cierra los ojos a lo prohibido y escucha la ciencia que es necesaria, que sea beneficiosa la sociedad, es paciente en las dificultades y sólo ve a Dios”, en otras palabras, la piedad siendo la abstinencia del pecado, como uno de los factores más importantes de la salud comunitaria, tan importante para el mundo de la actualidad; pues como lo hemos señalado, se ha entrado en una espiral de deshumanización carente de ética donde el individualismo y el egocentrismo se imponen sobre la solidaridad, la discriminación y el racismo sobre la fraternidad, el armamentismo y la guerra de los poderosos sobre la paz, y es justamente lo que está llevando a un mundo carente de espiritualidad, y es que en aras de ello surge la apremiante necesidad de enfocar esta visión de la Taqwa para impregnar la realidad histórica de espíritu, transformarla y humanizarla; pues para ser creyente hoy, se necesita una sólida espiritualidad.
Al respecto el Imam Alí (AS), el León de Dios y Puerta del Conocimiento de la Ciudad de la Sabiduría (3), dijo: “Evitar el mal es lo primero para adquirir el bien”, de ahí es que evitar el mal precede al logro del bien, así como un enfermo no ve salud sin abstinencia, aunque use drogas más fuertes y efectivas, así el que está lejos de la verdad y ajeno a la “espiritualidad”, sin observar la “taqwa”, la piedad en el conocimiento, no verá la felicidad, a pesar de que realices las acciones más difíciles.
Se narra del mensajero de Dios (PBUH), quién dijo: “Ni siquiera he rezado para que vengas a mí, y he estado en silencio hasta que hayas venido a mí, no haré eso excepto por ti”, de hecho, si se inclina sobre la multiplicidad de oraciones, y de ayuno, no le serán útiles a menos que practique la piedad y se abstenga de coas prohibidas.
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Por lo que, en la dimensión de la acción, la taqwa, la piedad y la abstinencia del pecado, la evitación de las prohibiciones, es la base de todo bien y el fundamento de toda felicidad, evitar y esforzarse por no cometer pecados, y entonces nos preguntamos, ¿Cómo puede uno ser piadoso, y cómo se pueden quitar los pecados del escenario de la vida?
Y respondiendo a estas preguntas señalamos que poniendo en práctica la Taqwa, entendiendo éste término como “alejarse de los pecados y obedecer las órdenes de Dios”, es decir ponerse en un refugio, como la fuerza interna; ya que el Corán considera el requisito de la taqwa para sobrevivir al fuego del infierno y para la aceptación de las propias acciones, lo que trae bendiciones a la persona y la libera de las aflicciones en el mundo, de ahí que la taqwa tiene etapas, siendo la primera de ellas, el de preservar el alma del tormento eterno, mediante la adquisición de creencias correctas, luego evitar cualquier pecado, incluido el abandono obligatorio y el acto de pecar, para luego el establecer el autocontrol, frente a lo que ocupa el corazón que se aparta de la verdad, y esta es la piedad, pues esta es la luz divina que crea el conocimiento donde quiera que se establezca; es decir si una persona alcanza la taqwa, la piedad, y se vuelve piadosa, ya no volverá a pecar para arrepentirse más tarde.
En otras palabras, abstenerse de los pecados es la base de la religión, y en palabras de Abdul Husayn Dastghaib Shirazi ” Por lo tanto, absténgase de los pecados para convertirse en el adorador más piadoso. Adórnate de piedad. No hagas ni una sola buena acción sin piedad. Sin duda, Alá acepta muy bien esa acción que va acompañada de piedad, aunque sea insignificante. Como dice Allah, “Allah acepta las buenas acciones sólo de las personas piadosas”. (4)
En ese mismo sentido, el Imam Ya’far as-Sadiq (AS) dijo:
“Allah le reveló a Hazrat Musa (P):” En verdad, Mi esclavo no puede acercarse a Mí sin las Tres cosas que Me gustan”. Musa (P) preguntó con reverencia: “Mi Señor, ¿cuáles son esas tres cosas?” Allah respondió: “¡Oh! Musa esas Tres cosas son: Practicar la piedad en este mundo, abstenerse de pecados y llorar de miedo”. Musa (P) preguntó: “¿Quien cumple las Tres cosas obtiene compensación y recompensa?”.
Allah respondió: “El que practica la piedad en este mundo obtendrá el Paraíso. Al que llore debido a Mi miedo se le concederá una posición tan elevada que nadie más podrá alcanzarla. Los hechos de todas las criaturas serán contados. Pero el que se abstiene de lo que yo he prohibido, entonces no se llevará a cabo la contabilidad de sus hechos; sería admitido en el cielo directamente” (5).
De ahí es que, como lo estamos comprobando, evitar los pecados es imprescindible, para llegar a convertirse en una persona piadosa, y practicar al Taqwa, además de ello y vemos como una premisa fundamental en estos momentos que atraviesa el mundo donde las ansias del poder de los más poderosos están destrozándolo, por su arrogancia contra los más débiles, es ahí que se debe mostrar la práctica de la Taqwa, entendiéndola como la contención frente a la rebelión de los apetitos, es decir la acumulación de bienes, los defectos morales o el deseo de una vida de lujos y honores, como lo dice el Sagrado Corán «Y habitasteis en los mismos lugares que quienes oprimieron» (Sagrado Corán, 14:45); es decir que como un requisito de la taqwa, es que no se persiga una vida de lujos y de galas, y esto es tan importante ponerlo en práctica para obtener una visión de espiritualidad en la actualidad.
Y en palabras del Ayatola Jamenei “Si practican ustedes la taqwa, obtendrán resultados positivos, a los cuales se refiere Dios una y otra vez en numerosas aleyas del Corán: «Y sed temerosos de Dios para que, quizás así, se tenga misericordia de vosotros» (49:10) ―misericordia divina―; «Quizás así tengáis éxito» (2:189, 22:77, 8:45, 3:133, etc.) ―tener éxito se refiere a la salvación: si hay temor de Dios, el ser humano se salva―; «Quizás así fueseis bien guiados» ―aparece en varias aleyas: el temor de Dios es causa de guía divina y, cuando uno practica la taqwa, los problemas y los problemas insolubles se apartan ante uno y el camino correcto se ilumina” (6).
Al mismo tiempo el Gran Ayatolá Seyed Ali Sistani en sus muchos discursos ha enfatizando una vez más la adhesión a la Taqwa (atención plena a Dios) de Allah. Él ha dicho: ‘¡Oh ustedes que tienen fe! Tenga cuidado con Dios, y permita que cada alma considere lo que envía para mañana, y sea consciente de Allah. Allah es muy consciente de lo que haces. Y no seas como los que se olvidan de Allah, para que Él los haga olvidar sus propias almas. Ellos son los transgresores. ‘[59: 18-19] (7).
También, el Ayatolá Seyed Ali Sistani, ha señalado muchas veces que “Lo primero que se les ordena a todos ustedes y a nosotros mismos es adquirir taqwa de Allah (la atención de Dios) y tener yaqin (certeza) en el Último Día. Por lo tanto, cada uno de nosotros debería recordar que Allah es el Guardián de nosotros y que registra nuestras acciones en el libro; no se omite nada grande ni pequeño. El hombre es recompensado por todo, bien por bien y mal por mal” (8).
Por todo lo mencionado anteriormente es que se hace necesario, poner en práctica la Taqwa, la piedad como la conciencia de Dios, o piedad temerosa de Dios, la conducta correcta, la virtud, la cautela, la tolerancia, como principio islámico básico de la conciencia de Dios, junto con la hermandad, la igualdad, la equidad, la justicia visiones tan necesarias para este mundo globalizado; pues Dios ha dicho ‘¡Por el tiempo! De hecho, el hombre está perdido, excepto aquellos que tienen fe y hacen obras justas y se exigen unos a otros [seguir] la verdad y se exigen unos a otros a tener paciencia. [103: 1-3]
Notas:
1- Escritora, Periodista, Profesora e Investigadora Boliviana, miembro de la Asociación de Investigadores en Comunicación y Educación para el Desarrollo (AICED) y la Asociación de la Comunidad Islámica Ahlul Bait de Bolivia.
2- “El sermón de Al-Muttaqīn (en árabe: خطبة المتّقین , el sermón piadoso) es uno de los sermones más famosos del Imam ‘Ali (a) en el que describe a los musulmanes piadosos” Ibn Abī l-Ḥadīd, ʿAbd al-Ḥamīd b. Ḥibat Allah. Sharḥ Nahj al-balāgha . Editado por Muḥammad Abū l-Faḍl Ibrāhīm. Qom: Ismāʿīlīyān, [nd].
3- http://imamali.wiki/content/2538/Imam-Ali-P-Leon-de-Dios-y-Puerta-del-Conocimiento-de-la-Ciudad-de-la-Sabiduria.
4- https://www.al-islam.org/greater-sins-volume-1-ayatullah-sayyid-abdul-husayn-dastghaib-shirazi/taqwa
5- Ídem.
6- https://spanish.khamenei.ir/news/3816
7- https://www.world-federation.org/news/message-ayatullah-sistani
8- Ídem.
Fuente: es.shafaqna.com
